EL FENOMENO POVEDA.
En un momento en el que la crisis ha roto el pais por completo, ha llegado un cantaor flamenco para hacernos olvidar por momentos la situacion actual. Si hace un mes era la Eurocopa, el sábado por la noche fue Miguel Poveda. El coso taurino de Jerez pocas veces habrá visto unas colas de vuelta y media a la plaza de toros para entrar a disfrutar de la presentación del nuevo disco del catalán.
Y no es para menos. Tan sólo cuando vino Paco de Lucia a Jerez, pudimos observar un fenómeno de similares características. Posiblemente esto sólo se haya dado en el flamenco cuando Camarón era contratado en espacios de estas dimensiones.
Poveda ha conseguido lo que ya hiciera el de San Fernando, esto es; lograr el acercamiento masivo de los no aficionados a lo jondo al flamenco. Bien es verdad que Poveda tiene a su favor su exitoso anterior trabajo discográfico 'Coplas del querer'.
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| Fotografía: Ana Palma. |
El público que se congregó era de un perfil diferente al que se puede observar en un evento flamenco. Aquello fue más un evento social que acudir a escuchar cante por cante. Aunque lo hubo, y mucho. Pero el sello Poveda ya mueve masas y esto es sólo el comienzo de una carrera más que consolidada, pero popularizada hace escasos años.
El evento comenzó con más de una hora de retraso. Cerca de cinco mil personas y una sola entrada retrasaron el concierto.
En cuanto al protagonista, el diseño de sus espectáculos ha cambiado. La producción de 'Artesano' recuerda a grandes eventos, del corte del maestro Paco de Lucía. Y no es para menos. Dos pantallas custodiaban el escenario, en las que se presentó un adelanto del documental que se estrenará en breve. Y la salió el torero.
Clasicismo en el primer tercio, con soleá apolá, malagueñas de la Peñaranda y rondeña y resulta por alegrías con el baile de La Lupi. Intensidad desde el inicio, hasta el culmen de una 'Lupi' entregada, culta en sus movimientos y acaparando la atención ante el cante del catalán.
Como sabio que es de esto del arte, se acompañó de algunas de las mejores guitarras del momento, a saber: Jesús Guerrero, limpio y completo; Bolita, la improvisación medida; Diego del Morao: compás y compás. Parrilla: la tradición heredada.
Tientos, bulerías gaditanas presentadas por un 'Viva Cái' de Miguel que poco gustaron al público que le reclamó que estaban en Jerez. No fueron pocos en el público los que sentenciaron con un 'Viva Jerez'. Mal entendimiento del público al referirse al cantaor al estilo de bulerías que iba a iniciar.
Con el éxtasis del compás de amalgama, el paso al recuerdo y homenaje a Pencho Cross en la minera que ilustró sabiamente antes de pincelar con la copla 'La Ruiseñora' única copla incluida en su último discográfico.
Sin lugar a dudas, el cantaor tenía al público en el bolsillo. Cualquier gesto, cualquier movimiento era coreado y aplaudido por el coso abarrotado de admiradores. Hasta que llegó el cante por Triana, en forma de tangos. Provocaciones continuas, movimientos de caderas de Miguel, y el baile sentenciador de la cava trianera que encarriló 'La Lupi' pusieron de pie a más de uno.
Si antes decía que este espectáculo guarda ciertas similitudes con eventos similares a la gira de Paco de Lucia es por lo siguiente. Ambos dejan espacio para que sus acompañantes tenga su momento en el escenario. Paco con Farru y Miguel con 'La Lupi'. Ambos dejan espacio a las cuerdas de sus guitarras. En esta ocasión, fue la guitarra de Parrilla la que sonó por seguiriya en Mi.
Fandangos por soleá, sevillanas, alegrías de Serafino, nana de los rosales o bulerías (las del alfarero)fueron los cantes elegidos para culminar una primera parte dedicada en exclusiva al cante clásico. En estas últimas fueron protagonistas Londro y Jesús Méndez, éste último invitado de honor del catalán, que bordó el cante en un alarde de buen gusto y flamenquería.
A sabiendas que una gran parte del público había acudido para escuchar las coplas de Miguel, la segunda parte fue dedicada a éstas. Lo que alargó el espectáculo hasta las tres horas de duración. Como invitado de excepción, el piano de Joan Albert Amargós que musicalizó 'La niña del Albaicín', 'Vente tu conmigo', 'Ni un padre nuestro' o 'El último minuto'. Acertó con incluir 'A ciegas' y a hacer un homenaje a Antonio Gallardo.
El fin de fiesta fue de nuevo un homenaje a los 20 años del fallecimiento de Camarón cantando 'La leyenda del tiempo' y finalizando por bulerías con las 'pataitas' de Joaquin Grilo que apareció de la nada cuál gacela saltarina y se la pegó de sobresaliente, al igual que la pequeña Triana, nieta de Niño Jero que demostró de qué saga viene. El fenómeno Poveda es ya una realidad, tanto en sus condiciones de cantaor y coplero, como en su alter ego de popularidad. Larga vida a Poveda!
Ficha:
Miguel Poveda.
Diego del Morao, Parrilla, Jesús Guerrero, Bolita, Carlos Grilo, Londro, Luis Cantarote, Joaquina Amaya, Ana Maria González, La Lupi, Antonio Coronel, Paquito González
Texto:
Antonio Conde
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